Millonarios jugó un penoso partido, donde desnudaron los errores defensivos, poca marca, menos talento y efectividad. No salieron ni los cambios al DT Cocca. En el primer tiempo vuelve y nos cobran temprano por descuido, Peralta le pegó desde afuera (0-1). El cuadro azul reaccionó pronto y Ayron ante pase de cabeza de Díaz empató el marcador con pirueta en el área. A partir de allí Millos perdió la brújula y se dejó sonsacar del rival.
Algunas opciones dilapidadas y en otras Vikonis de ángel guardián. Los volantes mixtos no aportaron en marca ni creatividad, sin pena ni gloria Rojas y Silva. Robayo le puso ganas. El equipo embajador dejó que le enredaran el partido, acudió a pelotazos y se dejó involucrar en la provocación del cuadro asegurador, raspando y pegando. Nos atacaron por las bandas con velocidad y la falta de filtro en el medio conspiró en contra del local. Enzo y Nuñez se rajaron. La defensa un poco gelatinosa dejándose sorprender. Machado a veces equivocado. Franco, Díaz y Henao cumplieron a pesar de la derrota.
Para el segundo tiempo la entrada de Manga, Barreto e Hinestrosa no dio frutos. Escobar tratando de hacer la diferencia terminó embarrándola al hacerse expulsar. Millos buscó controlar el ritmo de juego pero equidad lo sorprendió con toque y contragolpe, viendo que su rival atacaba desordenadamente y sin inteligencia. Opciones fallidas y pelotazos a granel no concluyeron en nada. Hasta que llegó el jugador "marioneta" Yuber Asprilla (ex-azul) que ensombreció y silenció la tribuna con el descuento con tiro de media distancia que cogió a Vikonis salido (1-2).
El final del partido se convirtió en bochornoso espectáculo con guijarros tirados desde la tribuna de Techo, "payasos" en el piso haciendo tiempo, gritones y bocones (eliminados) en la cancha, árbitro lento y displicente, en fin, partido para el olvido porque debió ganarse según las hipotéticas cuentas.
La preocupación queda por un partido mal planteado y cambios ineficientes. Siguiente objetivo, ganar a Junior, si o si!.
Albiazul saludo.