Flojo partido azul 0-1

Partido de altibajos. Un desconocido equipo embajador, con novedades en la nómina producto de sanciones o rotación estuvo deslucido en el trámite del juego, perdió el balón en el primer tiempo donde parecía anestesiado o dormido.

Sin agresividad en marca y ataque mientras el rival se hacía dueño de la cancha. Pocas opciones nuestras, choques y nada más. Vega, desconcentrado e impreciso, Robayo fuera de foco, Rojas intrascendente, Quiñones sin proyeccción, Manga solo arriba, Mosquera perdido, Henao y Cadavid lentos. Blanco en lo suyo y Estrada sin ideas. 

Para el segundo tiempo, muy temprano se dejó sorprender Millonarios que ante la pasividad defensiva Hechalar supo aprovechar. No entiende uno a qué jugó el equipo en territorio paisa. A pesar de los sancionados, el técnico parecía más estar pensando en darle minutos a jugadores que no son titulares o a juveniles de la cantera que a realmente aspirar al liderato de la liga, es decir, no importaba el resultado porque ya era seguro estar entre los cuatro primeros de la tabla. 

La entrada de Nuñez por Rojas y Barreto por Mosquera le dieron algo de movilidad al cuadro azul, que insistió de manera aparatosa por momentos o intentando tocar mejor el balón. La reacción no fue suficiente, el partido se perdió por falta de actitud y ambición.

Después del sorteo sabremos a que atenernos. Clasificar a cuartos era la obligación. A partir de ahora no hay tiempo para errores ni desconcentraciones. Viene la parte más importante del torneo; tener fondo en la preparación física, jugadores en óptimo nivel, dar el primer golpe en los playoffs y buenos relevos en la cancha serán claves para el éxito y lograr ser campeón. 

Albiazul saludo.       

La actitud no se negocia: MFC 2 huila 1

Partido cerrado y complicado. El cuadro opita se dedicó desde el primer tiempo a buscar el cero echándose atrás, llenando el medio campo con dos líneas de cuatro y buscando un golpe de suerte. Con la ingenuidad e irresponsabilidad de Rangel al ganarse la expulsión, el equipo azul debió prodigarse más en la cancha y cambiar su esquema, dejando a Manga como único delantero. Las oportunidades no abundaban, la defensa local pasaba algunas afugias, la salida por las bandas no era prolija. Ambos equipos se equilibraron con diez jugadores.

El segundo tiempo arrancó mucho más dinámico y un pase al vacío enviado por Carrascal encontró a Machado bien ubicado para abrir el marcador. La alegría en la parcial local duró poco, la defensa azul se durmió y Palacios empató el juego. El arquero Sánchez (seguro y atento) se hizo sentir al conjurar un inminente gol del rival. 

Millonarios intentó irse encima para descontar, Huila se defendía y contra atacaba. Con la llegada de pocos jugadores embajadores ante la muralla huilense era imposible descontar. Los volantes Silva y Estrada no estaban alineados -poco desequilibrantes- y erraban pases queriendo llegar a las narices del arquero con toques que a la final no fructificaban. 

La entrada de Rojas (disciplinado y comprometido) por Carrascal, Mosquera (joven promesa) por Silva y González por Estrada le dieron oxígeno al equipo, más ritmo y manejo del balón. Vega y Díaz de rendimiento irregular. La hinchada empujaba sin cesar, hasta que un misil de Elkin Blanco encontró eco en la valla rival, para irse Millos arriba en el marcador 2-1. Si no puedes contra la muralla intenta desde media distancia, esa fue la clave del éxito.    

De ahí en adelante el partido transcurrió sin problemas hasta el final del encuentro. La actitud no se negocia! este equipo no se amilana hasta conseguir lo que busca.

Para destacar el planteamiento del contrario porque desacomodó la estrategia planteada por DT Israel y reconocer el gran trabajo de Escobar, Sánchez, Blanco y Cadavid.  

Arbitraje flojo y permisivo. Dejó quemar tiempo al visitante con "falsas" lesiones y payasadas del arquero.

Paso a paso consiguiendo objetivos. Queda una fecha del torneo, ya veremos como se plantea el calendario final.

Albiazul saludo.

   

Triunfo justo y necesario 0-3

No fue un partido brillante de Millonarios pero si efectivo, aprovechó los errores del rival y cobró. Alineación azul con novedades (Vega, Díaz, Agudelo, Escobar, Sánchez). El cuadro embajador arrancó el partido con actitud, entusiasmo, con presión y anticipo. El trámite del juego era denso hasta que en jugada preparada Silva tocó, Estrada se adelantó y en rebote pegó en Henao para abrir el marcador.

Blanco y Robayo estuvieron atentos en marca. Estrada y Silva se juntaron más aunque pecan por confiados y no pasar el balón de primera intención. Agudelo y Manga buscando profundidad por las bandas y Machado y Vega en permanente proyección. La defensa a veces perdía los duelos por arriba. Díaz hizo un buen partido. Equidad tuvo el control pero no hacía daño y en una viveza entre Machado y Manga este último aprovechó y remató al arco para el segundo del visitante.

Para el segundo tiempo el módulo táctico cambia según las circunstancias. El cuadro asegurador salió a buscar el partido con movilidad y toque. El onceno albiazul se fue quedando en defensa y los volantes ofensivos parecían dormidos, sin precisión ni ritmo. Se presentía la necesidad de cambios porque el equipo no llegaba con opciones claras. Rojas entró por Agudelo, Mosquera por Estrada, Carrascal por Blanco. Silva despertó del letargo y ante una jugada genial de Harold Mosquera por la punta entró y habilitó al volante, que con un amague oportuno clavó el tercero para alegría de la hinchada y desmotivación para el rival.

Tres puntos. Justo y necesario. Arco en ceros para retomar la confianza, renovación en la nómina. Segundos en la tabla y con la mira y objetivo cumplido de llegar a semifinales. La idea es no salir de los cuatro primero clasificados. Sigue Huila en Bogotá y la expectativa de seguir sumando.

Albiazul saludo.     

  

  

Millos 1 Mayer 2

Sentido homenaje al ex-capitán y de paso nos hizo la fiesta. Millonarios se desdibujó, perdió la brújula, no supo descifrar el partido, llegó dormido, perdió el balón, con pases errados se dejó manejar el partido en el primer tiempo y pagó caro los errores garrafales en defensa. Candelo con su genialidad y el portero de burdel (quemando tiempo a su antojo) desesperaron al público en la tribuna. Estrada y Silva, desconocidos, deben aprender de la experiencia y calidad de jugador como el mencionado 10.  

Si el mejor del local en mi opinión fue Blanco, entonces estamos en la "mala" con este bache. El cuadro azul intentó por las bandas y media distancia pero su ineficiencia, falta de coraje y actitud dieron al traste con el partido. No se nota un jugador que haga la diferencia, que se eche el equipo al hombro. El ritmo del partido dejó mucho que desear y tristemente el pelotazo fue lo único que pudo hacer el equipo embajador. Cortuluá recurrió al contragolpe e hizo daño cuando el local le regaló la espalda al delantero Borja.

Rangel y Nuñez, espectadores. Aunque hubo llegadas con Robayo, Escobar y otros se malograron ante la muralla contraria. No hubo llegadas claras, faltó contundencia. Silva, a pesar del gol, fue un ave de paso. Vega y Machado apoyando pero no se cristalizó en goles su accionar. Vikonis se contagió de la ansiedad y nada pudo hacer en los goles, atribuibles a la desconcentración defensiva. El ingreso de Carrascal, Rojas y Manga pretendía darle vuelta al partido, cosa que no sucedió. No hubo juego colectivo, solo desespero, presión y nerviosismo. 

En general, rendimiento mediocre del equipo en la noche de hoy. Candelo le ganó la partida al DT Israel. La clasificación aunque no lejana requiere resultados en los últimos tres partidos ante Equidad, Huila y Medellín. Si el equipo pretende llegar a instancias finales, deberá reaccionar y acudir a la memoria colectiva, concentración, contundencia, solidaridad y actitud mental sin excepción. Arbitraje de flojo nivel.

Albiazul saludo.