Millonarios inició el partido con agresividad, empuje y ganas pero con el correr de minutos se hizo más intenso y friccionado. Al cuadro embajador le faltaron ideas, pausa y colectividad. Las pocas opciones no fueron concretadas para rematar al rival, por el contrario dejó que se despertara.
Primer tiempo aburrido, falta de talento en ambos equipos. Domínguez intentaba llevar las riendas del azul con pases largos, el control del balón no existía, iba y venía sin ton ni son. El trámite del juego era grotescom patadas y lesiones, peor que picadito de barrio.
Millos atacaba pero no profundizaba. Hasta que llegó el gol de Quiñones (habilitación entre Mosquera y Enzo de pivote). Júbilo y felicidad. La ansiedad mató a Mosquera y Elíser en dos nuevas oportunidades, lástima!.
Para el segundo tiempo las cosas no parecían cambiar. Entró Duque por Domínguez (tironiado). Mucha velocidad pero sin control de balón por parte del local. El enganche tampoco apareció. Arango desapareció, no tuvo fuerza ni reacción. Entró Nuñez por Mosquera. Error "delictivo" del árbitro Pontón al expulsar al defensa Figueroa, quien llegó primero al balón, esto fue determinante. Ingresó Franco por Enzo. Dos errores, uno de Vikonis que salió mal y llegó el empate de cabeza (Marrugo, 1-1). El otro, desatención de Henao y regaló el balón para el segundo del rival (Caicedo, 1-2).
Se revivió al cuadro paisa que jugaba mal. Millonarios con 10 no pudo remontar a pesar de haber mostrado actitud y seguir buscando el arco contrario. Próximo miércoles y se sabrá para que está hecho este equipo?
Albiazul saludo.
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